dissabte, 15 de gener del 2011

ADIOS AL TABACO



Es muy larga esta despedida, han pasado muchos años desde que supe que un día te tendría que decir adiós y he sentido siempre con intranquilidad y miedo que ese momento llegaría. Otras veces en mi vida he tenido que decir adiós, amigos que me han dejado, y seres queridos, la perdida de mis padres, y me parece mentira que puedo estar comparando el desapego hacia ti, como si de una persona te trataras.
Es cierto que has influido en mi más que los seres que admirado en la historia, porque me has impuesto una forma de vivir, alerta , pendiente ,siempre controlando que no me faltes, y tu siempre controlándome a mi - es esa relación amo y esclavo en la que el amo, tu, necesita tanto al esclavo como el esclavo al amo-.
Tú, como amo, me necesitas para seguir obteniendo tus beneficios económicos y poder invertir esos beneficios en empresas de armamento y poder fabricar capital fantasma.
También me necesitas para que colabore en pagar una parte de tu contribución a los presupuestos generales del estado a través de los impuestos que recaudas cajetilla a cajetilla.
Y yo te he necesitado para llorar, para reír, para hablar por teléfono, para leer un periódico, para escribir, para contar , para cantar, para ir a la playa, para subir al tren para bajar del tren, para trabajar, para entrar a un juicio, para salir de un juicio, para empezar una visita, para acabar una visita, para ver llover tras la ventana, para ver salir el sol, para ver ponerse el sol, para ir a una boda, para ir a un entierro, para romper una relación, para empezar una relación .
Ahora te necesito para romper la relación contigo que será ese marcado día D- todo tiene su momento bajo el sol dice el libro Eclesiastés, y ese es el momento. A partir de entonces iniciaré una nueva relación, con mi cuerpo, con mi entorno, y ya no quiero que tu estés, no quiero que seas mi intermediario, pues la comisión que te llevas es demasiado alta, y además tu amistad ha sido falsa, has fingido durante demasiado tiempo estar de mi parte, y tu solamente estabas de la tuya. Como un vampiro te has servido de mi cuerpo para seguir existiendo. Ahora mis puertas para ti estarán cerradas.

OLAYA LOURDES CHECA PEREZ

Abogada.